El Banco Central de Nicaragua (BCN) publicó el 1 de febrero de 2019, el Informe de Condiciones Financieras, correspondiente al tercer trimestre de 2018.

El informe indica que, al tercer trimestre de 2018, las condiciones financieras han mostrado variaciones que exceden la banda de dos desviaciones estándar, lo que sugiere condiciones financieras más estrechas, siendo los indicadores de agregados monetarios la categoría de variables que más contribuyó a la baja del índice. Esta categoría reflejó la reducción de los depósitos del sector privado y el menor crecimiento de la demanda de dinero. Los indicadores crediticios también aportaron a la baja del índice, debido a un menor dinamismo en el crédito al sector privado.

Con respecto a los indicadores de posición externa del país, las reservas internacionales disminuyeron producto de la compra de divisas realizada por el sistema financiero. Además, el tipo de cambio real se depreció, como reflejo del deslizamiento cambiario y un contexto de inflación relativamente baja. En igual sentido, la categoría de tasas de interés aportó al estrechamiento de las condiciones financieras como resultado de los cambios en las tasas domésticas. Estos cambios se dieron en un contexto de alzas en la tasa de interés internacional, así como incrementos en el premio por riesgo crediticio.

Los indicadores relacionados con la calidad de los activos y de eficiencia en el proceso de intermediación registraron deterioros, aportando a la baja del ICF. La proporción de créditos en riesgo y los créditos en mora aumentaron respecto al trimestre anterior. Además, el margen de intermediación y la rentabilidad sobre activos disminuyeron. Este resultado obedece a un aumento de las provisiones por incobrabilidad de créditos.

Finalmente, solo las categorías de indicadores bursátiles y de precios de materias primas aportaron al relajamiento de las condiciones financieras, aunque esta contribución fue muy baja.

Véase el Informe de Condiciones Financieras al Tercer Trimestre 2018

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