Presentación del Informe Anual 2018 en Asamblea Nacional Presidente del BCN, Cro. Ovidio Reyes R.
Buenos Días Cro. Gustavo Porras, Presidente de la Honorable Asamblea Nacional, miembros de la Junta Directiva, Diputados y Diputadas, medios de comunicación, invitados todos.
En cumplimiento con el artículo 32 de la Ley No. 732, Ley Orgánica del Banco Central de Nicaragua, el Banco Central presentó el Informe Anual 2018 al Presidente de la República el 29 de marzo de 2019; y ha sido puesto a disposición del público en la página web de nuestra institución.
Este Informe Anual sintetiza el desempeño económico del país durante el año 2018, el que se resume de la siguiente manera:
En 2018, Nicaragua experimentó una serie de acontecimientos sociopolíticos que afectaron a diversos sectores de la economía, alterando la tendencia de crecimiento económico que se venía observando desde 2010, lo que se reflejó en afectaciones a la actividad económica estimadas en 1,453.3 millones de dólares, reducción de la ocupación hasta el tercer trimestre en 154,512 trabajadores y 139,918 adicionales que salieron de la fuerza laboral. Adicionalmente se cuantificaron daños a la infraestructura por 204.6 millones de dólares.
Pese a lo anterior, la consolidación macroeconómica alcanzada en los últimos años permitió enfrentar dichos acontecimientos desde una posición de relativa fortaleza económica y financiera: mayor diversificación en el sector real, adecuado nivel de reservas internacionales, finanzas públicas caracterizadas por bajos déficits fiscales, ratios de deuda pública sostenible, y un sistema financiero sano, líquido y capitalizado.
Las autoridades económicas adoptaron una serie de medidas coordinadas para preservar la estabilidad económica. Así, el Banco Central de Nicaragua (BCN) complementó el esquema de conducción de la política monetaria con la introducción de las operaciones monetarias diarias de absorción e inyección de liquidez, flexibilizó la política de encaje legal y simplificó su línea de asistencia financiera, entre otras medidas. Por su parte, el Gobierno realizó una reforma al Presupuesto General de la República (PGR2018) orientada a salvaguardar la sostenibilidad fiscal, la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (SIBOIF) emitió la norma de alivio a deudores, se creó el Comité de Estabilidad Financiera y el marco jurídico para la emisión de los bonos para el fortalecimiento de la solidez financiera, entre otras. Estas políticas permitieron preservar la estabilidad macroeconómica en aspectos claves como la convertibilidad cambiaria, la estabilidad financiera y el adecuado funcionamiento de los sistemas de pagos.
En este contexto, después de un primer trimestre positivo que apuntaba a la continuidad de un buen año en materia económica y social, durante 2018, algunas actividades fueron afectadas negativamente, entre ellas sobresalen Hoteles y Restaurantes (-20.2%), Construcción (-15.7%), Comercio (-11.4%), Pecuario (-5.4%), Intermediación Financiera (-5.4%) y Transporte y Comunicaciones (-3.5%). Otras actividades mostraron buen dinamismo, como: Pesca y Acuicultura (14.7%), Agricultura (3.3%) y Explotación de Minas (1.7%). No obstante, en el agregado el Producto Interno Bruto (PIB) registró una reducción de 3.8 por ciento, lo que impuso un freno al crecimiento promedio logrado en el período comprendido entre 2010 y 2017 (5.1%).
Desde el punto de vista de la demanda agregada, la demanda interna fue la que más resintió los efectos de la reducción en la actividad económica, con una disminución de la formación bruta de capital (-23.6%) y del consumo (-4.5%). Por su parte, la demanda externa reflejó un menor dinamismo de las exportaciones (-2.6%) y el ajuste en la demanda de importaciones (-14%).
La disminución de la actividad económica tuvo repercusiones importantes en el empleo. La Encuesta Continua de Hogares (ECH) reflejó un incremento en la tasa de desempleo abierto que alcanzó 6.2 por ciento al tercer trimestre (3.3% al IV trimestre de 2017) y una reducción en la tasa global de participación laboral que se ubicó en 70.3 por ciento al tercer trimestre (73.0 por ciento al tercer trimestre 2017). Mientras que los asegurados activos al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) totalizaron 755,874 trabajadores, lo que representó una reducción interanual de 17.3 por ciento, equivalente a 157,923 afiliados menos. Las principales reducciones de asegurados se dieron en las actividades de comercio (-69,318), servicios comunales, sociales y personales (-36,590) y servicios financieros (-16,266).
Los resultados en materia de actividad económica y empleo se presentaron en un entorno de inflación baja, a pesar que entre los meses de mayo y julio se obstruyó la libre circulación, lo que afectó parcialmente la producción y el abastecimiento de los centros de distribución. La inflación en 2018 se ubicó en 3.89 por ciento (5.68% en 2017), resultado que estuvo determinado principalmente por los menores precios en la división de alimentos dado el régimen favorable de lluvias y la baja inflación internacional.
Las finanzas públicas se tensaron ante el impacto negativo en los ingresos del Sector Público No Financiero (SPNF), por lo que la política fiscal fue ajustada, reflejando un enfoque prudente de contención del gasto. En este contexto, el déficit del SPNF después de donaciones se ubicó en 4.1 por ciento del PIB (2.0% del PIB en 2017), y el endeudamiento público en 52.5 por ciento del PIB (46.9% del PIB en 2017).
Por su parte, la política monetaria fue activa, desarrollándose en medio de aumento de la demanda por liquidez y reducción de los agregados monetarios. Los bancos, de forma precautoria, incrementaron sus requerimientos de efectivo, tanto en moneda nacional como extranjera. Adicionalmente, se observó un uso de recursos del Gobierno en el BCN. Los elementos anteriores se reflejaron en ventas netas de divisas de parte del BCN al sistema financiero y desacumulación de reservas internacionales. No obstante, al cierre de 2018, las reservas internacionales brutas (RIB) se ubicaron en 2,261.1 millones de dólares, reflejando una estabilidad en los indicadores de cobertura que representaron 2.43 veces la base monetaria y 5.2 meses de importaciones de mercancías CIF.
El sector financiero fue sometido a estrés. Así, los depósitos mostraron una reducción de 20.7 por ciento, mientras que la cartera de crédito registró una
disminución de 9.2 por ciento interanual. Sin embargo, los indicadores de liquidez se fortalecieron, mientras que los indicadores de solvencia y capitalización continuaron reflejando niveles por encima de los requerimientos legales.
El escenario adverso que sufrió la economía, derivó en la reducción de algunos flujos externos como el turismo (-41.1%) y la Inversión Extranjera Directa (IED) (-63.2%). Así, la cuenta corriente de la balanza de pagos registró un superávit de 0.6 por ciento del PIB, hecho que no se registraba en muchos años. Lo anterior, resultó principalmente del efecto de la reducción en la demanda de importaciones, aunado por el buen desempeño de las exportaciones de zona franca, así como, en la continuidad del dinamismo de los flujos de remesas (7.9%).
El valor de las exportaciones totales, incluyendo mercancías y zona franca, reflejó un crecimiento de 3.9 por ciento respecto a las exportaciones totales de 2017. Lo anterior, explicado principalmente por el aumento de las exportaciones de zona franca que registraron un crecimiento interanual de 8.8 por ciento (1.0% en 2017), mientras que las exportaciones de mercancías mostraron una reducción de 1.2 por ciento (14.5% en 2017), debido a que no logró compensarse en volumen el efecto de menores precios internacionales sobre el valor de las exportaciones.
Con relación a las importaciones, éstas reflejaron una reducción de 8.5 por ciento respecto a 2017. La menor entrada de importaciones respondió a una disminución de la demanda interna, que se reflejó en una menor adquisición de bienes de capital, bienes intermedios y de consumo. Lo anterior, se presentó a pesar del incremento en la factura petrolera de 12.7 por ciento respecto a 2017. En el valor de la factura incidieron las mayores compras de petróleo crudo, debido principalmente a un aumento en el precio, mientras que el volumen importado disminuyó.
Desde el punto de vista del contexto internacional, la economía nicaragüense se desarrolló en un entorno mixto. El repunte económico global que inició a mediados de 2016 se mantuvo durante 2018, aunque con menor vigor que el observado en 2017. La economía mundial registró un crecimiento de Informe anual 2018 3 Resumen ejecutivo 3.7 por ciento en 2018 (3.8% en 2017), como resultado del buen desempeño tanto de las economías desarrolladas como de las economías emergentes, aunque con una tendencia a la baja a partir del tercer trimestre, principalmente en las economías europeas y de Asia. Sin embargo, los términos de intercambio resultaron negativos presentando una reducción del 8.2 por ciento.
Finalmente, con respecto a las operaciones del Banco Central de Nicaragua, en 2018 se presentó un resultado en correspondencia con los elementos de las políticas monetaria, cambiaria y financiera implementadas. En el balance general del Banco, destaca la disminución del saldo de las reservas internacionales brutas (RIB) y de las obligaciones del MHCP con el BCN, el desembolso recibido del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) y las operaciones de inyección de liquidez al sistema financiero nacional mediante el instrumento de reportos monetarios. También se destaca el aumento en el rendimiento de las inversiones de las reservas internacionales y la administración del efectivo de la Tesorería del Banco.
Les agradezco su atención y estoy a su disposición, Muchas Gracias.
Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras
Vamos a dar a las preguntas aclaratorias, tenemos anotados tres diputados, cerramos con el diputado Wálmaro Gutiérrez Mercado.
Le damos la palabra al diputado Alfredo César Aguirre.
Diputado Alfredo César Aguirre
Gracias, me tocó presidir el Banco Central en un momento de escasez de divisas como el que vive ahora el país. En el año 81, el país estaba gobernado por la Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional y se habían comenzado a imponer las primeras sanciones económicas de parte del gobierno republicano del Presidente Ronald Reagan, poquito parecido a lo que está ocurriendo ahora con las primeras sanciones que se han recibido el gobierno republicano del Presidente Donald Trump. Y me tocó vivir momentos muy difíciles porque cuando las divisas escasean, la situación al frente del Banco Central se vuelve muy crítica.
En el Informe que estamos recibiendo hoy, por parte del Presidente del Banco, el Doctor Ovidio Reyes, demuestra varias cosas que se han logrado sostener durante este primer año de crisis generalizada, entre ellas una inflación baja, un precio de la moneda estable, no ha habido devaluaciones, más que la usual del 5% anual que ya es avisada y que tenemos ya una buena cantidad de años de estarla aplicando en Nicaragua. No ha cambiado ese régimen.
Pero lógicamente donde se han pagado los platos rotos de la crisis y de las sanciones es en el nivel de reservas del Banco Central, es decir, el monto de divisas con que el país cuenta para hacer frente a todas sus necesidades de importación de pago de deuda externa y de otras necesidades en los servicios. En un año, el Banco Central ha perdido la mitad de sus Reservas Internacionales Netas, hablo de las Netas pues, porque, tal vez es más fácil de comprensión para el ciudadano común y corriente que no es especialistas en estos temas.
Las Reservas Internacionales Netas son verdaderamente la cantidad de divisas que le pertenecen al Banco Central y que puede hacer uso de ellas, porque en las Reservas Internacionales Brutas hay una cantidad adicional de divisas que no le pertenecen al Banco Central y que por lo tanto no puede hacer uso de ellas. Es más fácil para el ciudadano normal común y corriente que no tiene esa especialidad hablar de las Reservas Internacionales Netas, que repito, es verdaderamente la cantidad de divisas que el Banco Central dispone para hacer frente a las necesidades del país. Y en un año básicamente redondeando cifras, las Reservas Internacionales Netas pasaron de 2 mil millones a 1,000 millones, que es lo que tenemos actualmente.
Y eso no ocurría, para que tengamos una idea de la magnitud de esta caída, esto no ocurría desde allá por el año 2010, tener un nivel de reservas internacionales netas cercano a los 1,000 millones de dólares en lugar de los dos mil que teníamos hacia un año y, por lo tanto, ocasiona la primera preocupación a que se refiere la primera pregunta y es lo siguiente.
Es del conocimiento público, y hoy lo indica el Informe Anual del 2018, que el Banco Central, de esa disminución de 1,000 millones aproximado en un año le proveyó divisas a los bancos comerciales, 840 de los 1,000 millones, es decir el grueso, 843 para hacer específicos de acuerdo al informe, millones de dólares el Banco Central le proveyó a los bancos comerciales para que a su vez los bancos comerciales pudieran hacer frente al retiro masivo de depósitos del público, que ya suma más de 1,700 millones de dólares retirados por el público en sus depósitos en los bancos comerciales privados. Y de esos 1,700 retirados, repito 843, prácticamente la mitad fueron proveídos por el Banco Central, es decir, que ocasionan la principal razón de la diminución de la Reservas Internacionales Netas, en suplirles a los bancos comerciales privados esas divisas para hacer frente al retiro de depósitos.
La pregunta es: dado que estamos a punto de iniciar el segundo año de crisis económica y los indicadores realistas indican que siguen saliendo y seguirán saliendo los depósitos del público, por lo tanto, seguirán bajando las Reservas Internacionales Netas. ¿Qué acción tiene preparado el Banco Central para evitar que dentro de unos meses no tengamos ni siquiera divisas para importar lo básico que el país necesita? y tiene que ser ligado de alguna manera, una acción ligada a continuar proveyendo divisas a los Bancos comerciales que continúan haciendo frente a la salida de depósitos del público. ¿Qué acción tiene previsto el Banco Central en los próximos meses, a días de entrar el segundo año de crisis económica abierta y que continúan las sanciones igual para evitar que nos quedemos sin divisas para las causas fundamentales que hay que importar?
La segunda, muy brevemente tiene que ver con la preocupación del ciclo agrícola que también estamos a las puertas de iniciar en Nicaragua. Los bancos privados han hecho frente al retiro de depósitos del público, disminuyendo el crédito, eso también es público. Se ha disminuido drásticamente el crédito disponible para los sectores productivos porque los bancos preservan lo que reciben de pago de los clientes y otros ingresos para poder tener suficiente dinero en caja y satisfacer a cualquier cliente que retira su depósito. Es una acción defensiva lógica de un banco privado. Pero claro, el daño o los platos rotos en este caso viene en la disminución drástica del crédito a los sectores productivos y particularmente me estoy refiriendo al ciclo agrícola que ya va a comenzar.
Segunda pregunta y última. ¿Qué acciones tiene previsto el Banco Central para lograr por lo menos algún grado de financiamiento para el nuevo ciclo agrícola que se presenta y no tengamos un ciclo agrícola en los próximos meses que verdaderamente deprima tal vez el único sector que hasta el momento se ha visto menos afectado por la crisis política y social y, particularmente, recordemos que un aspecto primario para la vida de todos los nicaragüenses lo que se produce en el campo y el financiamiento de esos productores es esencial. Gracias.
Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras
Damos la palabra al diputado Douglas Alemán.
Diputado Douglas Alemán
Gracias Presidente.
Bueno lo que aquí normalmente se menciona como crisis política, fue el periodo del intento de golpe de estado que provocó una crisis política en el país.
Yo recuerdo cuando se hizo el show llamado diálogo, el año pasado, haber visto al Presidente del Banco Central advirtiendo a los sectores de oposición involucrados en este intento, advirtiéndoles el daño que esto podría provocar y que ya estaba provocando a la economía. Recuerdo haber visto y oído al Presidente del Banco Central anunciar cuando ya íbamos por un menos 2% del crecimiento que estaba previsto. Hubo quienes dijeron que era un costo que estaban dispuesto a pagar, la verdad que el costo lo hemo pagados todos los nicaragüenses.
Yo quiero felicitar al Banco Central por el manejo sano que ha hecho en los últimos 11 años de la economía nicaragüense. Un manejo sano que nos ha permitido mantener una paridad cambiaria estable, un nivel de inflación aceptable y un crecimiento económico que ha sido un ejemplo en América Latina.
Incluso me atrevo a decir que también el Banco Central dio muestras de excelentes capacidades al hacer un manejo sano de la economía en momentos de crisis. Lo felicito Ovidio porque si ustedes no han hecho ese manejo de la economía en esos momentos, realmente estuviéramos en una crisis económica irreversible. Las Reservas Internacionales que precisamente se vinieron aumentando en la época de vacas gordas nos sirvieron realmente para hacer frente a la crisis en un momento en que la vaca no es que estaba flaca sino en que la estaban queriendo matar, que era la economía.
Los productores agropecuarios, mucho se habla de este tema por todos lados del ciclo agrícola, los productores agropecuarios no desmontamos nuestro trabajo y es por eso que ustedes vieron el año pasado que a pesar de la crisis provocada a pesar de los obstáculos internos al comercio como fueron los tranques, la actividad agropecuaria se mantuvo y los productores lógicamente nos mantuvimos haciendo esfuerzo.
No se preocupen por el financiamiento al sector agropecuario para este ciclo agrícola porque nunca lo hemos tenido. La banca privada no nos va quitar lo que nunca nos ha dado. A la ganadería no ha sido capaz de financiarle más del 2.3% de su cartera. Por lo tanto, no se preocupen, que nosotros no vamos a dejar de producir porque la banca privada no nos preste, porque no lo hemos dejado de hacer en todos estos años a pesar de esa ausencia de crédito. El sector agrícola y el sector ganadero vamos a garantizar la alimentación de nuestro pueblo, lógicamente estamos enfrentando dificultades, pero venimos de un sector que es noble, es perseverante, y nos vamos a ver al fin de año presentando cifras positivas de crecimiento en la producción de frijoles, de maíz, de arroz, de carne y de leche, porque esa responsabilidad de alimentar a nuestro pueblo los productores agropecuarios la asumimos con seriedad y eficiencia. Muchas Gracias Presidente.
Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras
Gracias, cerramos las preguntas en el orden de la palabra con el diputado Wálmaro Gutiérrez Mercado.
Diputado Wálmaro Gutiérrez
Muchas Gracias Sr. Presidente, muy buenos días, hermanas y hermanos diputadas y diputados. Buenos días pueblo nicaragüense que sigue los debates parlamentarios en esta Asamblea Nacional y al cual todos los diputados y diputadas nos debemos como electos directamente por el voto popular del pueblo nicaragüense. Y es a ese pueblo nicaragüense al que nosotros debemos de dirigirnos el día de hoy, porque ahora que nosotros recibimos el Informe del Banco Central, obviamente dentro de las características y el tecnicismo que le corresponde a una entidad financiera y monetaria como el Banco Central, hay muchos elementos de ese Informe que para el grueso de la población nicaragüense es poco digerible, es poco entendible, y creo que es imperativo, que de ese informe, nosotros sustraigamos algunos elementos que son importantes que el pueblo de Nicaragua asimile y entienda.
En primer lugar, este no es un Informe para celebrar, no es un Informe para celebrar. Informes para celebrar fueron los que desde el año 2008 y hasta el 2017, se presentaron sobre el estado de la economía nacional, donde los nicaragüenses nos acostumbramos a crecer un promedio del 5% anual y donde redujimos las tasas de pobreza y pobreza extrema como ningún gobierno en los 153 años de historia republicana pudieron hacer, ¡esos eran Informes para celebrar ¡.
El día de hoy estamos frente a un Informe que nos refleja una realidad cruda de lo que fue el verdadero objetivo del intento de golpe de estado, que gracias a Dios las y los nicaragüenses pudimos superar, y que con los esfuerzos del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, incluso en la actual mesa de diálogo, se están creando las condiciones para restituir el derecho fundamental de las y los nicaragüenses que es vivir en paz.
Cuando nosotros vivíamos en paz pudimos reducir pobreza, pudimos generar empleo, pudimos generar las mejores condiciones de vida que el nicaragüense puede recordar en estos últimos 153 años de historia republicana. Sin embargo, el día de hoy, estamos frente a un Informe que en vez de informarnos que estamos creciendo a esa tasa de 4.8%, 5% promedio anual, nos está diciendo que tuvimos un crecimiento negativo del 3.8%, ¿Qué significa eso para las y los nicaragüenses? significa una reducción sensible, sensible, en el bienestar de la familia nicaragüense, en menos recursos, menos recursos para garantizar la restitución del derecho a la educación, más niños en nuestras escuelas, más jóvenes en las escuelas secundarias y universidades, mayor atención en salud, mayor inversión en infraestructura para ser más competitivo. Esas cosas no se dieron como consecuencia del intento fallido de golpe de estado, esa es la realidad que nos dice, eso significa no haber crecido o crecido negativamente en un 3.8%.
Y todavía me resuena en los oídos porque incluso hasta Ovidio estuvo en esa mesa de diálogo, que fue un verdadero sainete en ese momento, cuando los personeros de mi Gobierno, llegaban a decir señores dialoguemos, pero no afectemos la economía, porque estamos afectando a los más pobres de este país. Se equivocan pensando de que a un Gobierno o a un Presidente es al que están afectando. Ya Nicaragua merece una mejor clase política, no es a través de destruir al país que vamos a fortalecer la democracia. Sin embargo, se alzaron voces tan impertinentes y obtusas que llegaron a decir que esto que está presentando el Banco Central el día de hoy es un costo económico que íbamos pagar y que estábamos dispuestos a pagar las y los nicaragüenses. Y le pregunto al pueblo de Nicaragua, ¿Realmente nosotros estamos dispuestos a pagar por esta barbaridad que hicieron unos cuantos? Me parece que no. Y es por eso que tenemos que tomar la lección, aquí en este país, la Paz y el Diálogo es el único camino para restituir el derecho de las y los nicaragüenses a vivir en bienestar, a vivir en un país mejor, no es a través de la destrucción.
Señores. ¿qué podemos esperar nosotros?, porque es importante que lo sepamos: qué podemos esperar cuando se propiciaron daños a instituciones tan importantes para este país; solo en infraestructura al INSS 2.6 millones de dólares, a MIFAMILIA 1 millón de dólares, al MINED 229 mil dólares, a las alcaldías 147.7 millones de dólares, a ENATREL 1.6 millones de dólares, al MTI 39.6 millones de dólares, a la Policía Nacional 5.7 millones de dólares, en otras palabras, 204 millones de dólares en daños al pueblo de Nicaragua. ¿Saben que representa esto según los datos de nuestro Presupuesto General de la República? Casi el 28% del plan de inversión pública anual del año 2018 en destrucción, en quema de alcaldías, en destrucción de hospitales, de centros de salud, de carreteras, de caminos para sacar la producción.
Ese fue el resultado, sólo se afectó a los más pobres de este país. Y es por eso que el pueblo de Nicaragua, aunque es amante de la paz y está comprometido con la paz, no olvida. Eso es importante que lo tengamos en la cabeza, porque no podemos olvidar, porque nosotros tenemos que tomar esta lección y a decir nunca más, no es posible, que cobijados en una bandera azul y blanco, o utilizando una bandera azul y blanco de pasa montaña, nosotros vayamos a cometer delitos y a desbaratar bienes públicos que tanto sudor y lágrimas le cuesta al pueblo nicaragüense. Porque esas alcaldías, esos centros de salud, esas escuelas, esas carreteras, esos caminos, todo lo que se destruyó no es consecuencia del dinero del bolsillo de un mandatario, es de los impuestos que todos y todas las nicaragüenses pagamos para tener un país mejor.
Por eso, lamentamos los resultados de este Informe. Lamentamos la situación de hechos en materia económica que nos han impuesto. Pero y empero aquí esta es una lección que el pueblo nicaragüense está pagando caro pero que también no olvidará, y ahí es donde nosotros tenemos que revertir rápidamente esto.
Y quién lo puede hacer, solamente el único Gobierno que pudo reducir pobreza a los niveles que redujimos pobreza, que fue el Gobierno del Frente Sandinista de Liberación Nacional que tiene un compromiso con los pobres en este país, y que vamos a seguir trabajando por mejorar las condiciones de vida de la población nicaragüense independiente del distingo, del color político ideológico que tengan. Porque la pobreza no distingue, porque cuando la pobreza patea las puertas de los hogares nicaragüenses y les enseña los dientes y las garras, no anda preguntándole que si es Liberal, que si es Sandinista, Conservador o que si no tiene ningún partido político. Es al pueblo nicaragüense al que el Frente Sandinista se debe. Por lo tanto, hoy no es un motivo de celebración, pero sí es un motivo de compromiso.
Primero, no pudieron, ni podrán, y segundo que este estado de cosas el Frente Sandinista de Liberación Nacional lo va a revertir porque es un compromiso que tiene con el pueblo de Nicaragua. Muchas gracias Señor Presidente.
Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras
Gracias. ¿Si tiene bien a responder Ovidio?
Presidente del BCN, Ovidio Reyes R.
Muchas Gracias Presidente. Me gustaría referirme a los temas que aquí se han expuesto.
Primero, con respecto al tema económico. En el Informe nosotros explicamos que la economía si bien recibió un impacto en el segundo trimestre del año 2018, el análisis nuestro más bien era ¿qué pasa después? Porque el impacto estaba dado y fue severo, fue grande. Y en el análisis de qué pasa después nos hemos encontrado que hay dos sectores de la economía que continuaron creciendo que es el sector primario y el sector secundario. ¿Qué son estos sectores? La agricultura, la pesca, la minería, la manufactura, principalmente, motivado por el dinamismo de las exportaciones. Y es el sector terciario o el sector de bienes de servicios; el sector de hoteles, restaurantes, comercio, comunicaciones y servicios financieros, el que está en mayor depresión.
Consecuente a eso también, y como había un problema en el Sistema Financiero, es que frente al Shock las personas decidieron retirar depósitos, pero otras decidieron usar sus depósitos debido a que el crédito se contuvo, después de todo los ahorros son para eso, para usarlos en malos momentos, entonces había un componente también de uso de los ahorros, entonces el Banco Central procedió, en política coordinada con el resto de instituciones públicas, también a facilitar los ahorros y el uso de los mismos que el país había acumulado durante los años de bonanza. Y teníamos cerca de 3,000 millones de dólares cuando la crisis comenzó, en reservas líquidas.
Quiero aclarar que para nosotros el tema de la liquidez es principal y nosotros pensamos en ese momento que teníamos que proveer liquidez al Sistema Financiero, porque de lo contrario podía venir una parálisis general en la economía. Y lo hicimos. Desarrollamos Reportos Monetarios; que básicamente son créditos al Sistema Financiero con algo que en la economía se le llama colateral, pero básicamente es respaldo con Títulos. Y alcanzamos una cifra de alrededor de los 11,000 millones de córdobas en el momento máximo de estos reportos. Hacia finales de año ya los Reportos Monetarios habían finalizado en cerca de los 7, 000 millones de córdobas, y esa es la línea de Reportos que más o menos el Banco Central mantiene con las instituciones financieras; un poco más de 200 millones de dólares. ¿En qué ayudó toda esta línea de Reportos? Bueno, colaboró en el ciclo productivo; puesto que dimos Reportos a más de seis meses y eso permitió apalancar, además el ciclo productivo, atender los requerimientos de depósitos.
Y nosotros dispusimos las Reservas Internacionales que no bajaron en 1,000 millones, voy aclarar eso, sino que menos que esa cantidad. Por ejemplo, las Reservas Internacionales Brutas que nosotros señalamos claramente, finalizaron en 2,261 millones, al inicio de 2017 estaban en 2,757 millones de dólares. Las Reservas Internacionales Netas, que este es un cálculo contable que se hace para ver de obligaciones cuánto se puede deducir de esas brutas, pasaron de 2,716 millones de dólares a 2,038. Las Reservas Internacionales Netas y las Reservas Internacionales Netas ajustadas pasaron de 1,802 a 1,145 millones, o sea unos 655 millones de dólares. Nosotros creemos que, con ese nivel de Reservas Internacionales, más otras acciones que se adoptaron, se facilitó la liquidez en la economía, los bancos pudieron mantener coeficientes de liquidez de alrededor del 32 por ciento, pudieron atender los depósitos del público y pudieron darle curso a la actividad económica.
No obstante, aquí hubo un cambio. Al inicio nosotros comenzamos con créditos de 6 meses, pero no nos corresponde al Banco Central realizar esa actividad, la actividad crediticia es privada, no es del Estado. El Estado no da préstamos, el Banco Central no puede dar préstamos. Lo que hacemos es apoyar en liquidez a las instituciones financieras y fungimos como agentes financieros del Gobierno. Ese es el mandato que tenemos por Ley, no tenemos un mandato de dar crédito. No obstante, con los Reportos nosotros incidimos en que el crédito fluyera, que es diferente. Y después que dimos Reportos de 6 meses, pasamos a los Reportos propios de Banca Central que son créditos de 1 hasta 7 días máximo y ahora todos nuestros Reportos están en ese mercado.
Tratando de responder un poco la pregunta que hizo aquí el Diputado Alfredo César sobre la continuidad del ciclo agrícola, ese es un tema que creemos nosotros que es relevante. Relevante porque el sector exportador ha estado respondiendo positivamente y es un sector que continuó y continúa hasta el mes de enero en nuestras informaciones, continúa presentando un desempeño positivo, entonces es necesario apoyar.
Una de las cosas que el Banco Central podría hacer en este nuevo contexto es volver a otorgar los Reportos crediticios de 1 a 7 días, hasta 6 meses para que el Sistema Financiero tenga posibilidad también de reactivar el crédito agrícola. Otra posibilidad es que el Banco Central permita la repatriación de ciertos depósitos que han salido del país o depósitos de la propia banca, o liquidez de la propia banca en el exterior, para dar una remuneración y a través de esa remuneración también movilizar el crédito.
Todas esas son fórmulas que nosotros hemos venido trabajando y que estaríamos a finales de este mes en la posición de poder decir que el Banco Central pudo haber apoyado la actividad. Pero nuevamente, no es nuestro mandato. Recordemos que la banca enteramente es privada, la banca comercial. Recordemos que la banca también es la que mueve las divisas. El Banco Central por el sistema de libre convertibilidad no capta las divisas privadas a diferencia de otros bancos centrales. Las remesas familiares los 1,500 millones de dólares que llegan al país, llegan a la banca privada, es la banca privada la que las moviliza, no es el Banco Central. Los 5,300 millones de dólares de exportaciones que llegan a Nicaragua, llegan a la banca privada no es al Banco Central. Incluso los ingresos por turismo llegan a la banca privada. El Banco Central lo que percibe en dólares es los excedentes de dólares que la banca comercial vende al Banco Central libremente y además de eso los ingresos de operaciones de contrataciones de préstamos internacionales que realiza la Tesorería General de la República. con esos fondos es que nosotros hemos venido operando y hasta ahora lo que hemos hecho es mantener los balances.
Creemos que la Reforma Tributaria y la Reforma de Pensiones que realizó el Gobierno vienen a apoyar la estabilidad también del flujo de divisas ya que equilibra los balances del Sistema Financiero, y en la medida en que también el Sistema Financiero logra mantener cierta estabilidad, también eso apoya al mercado de divisas. Lo que sí es cierto es que nosotros continuamos manteniendo el sistema de libre convertibilidad cero control sobre las divisas, ellas operan libremente en el mercado. La gente compra y vende al Tipo de Cambio que resulte en el mercado. El Tipo de Cambio Oficial es una señal, una referencia, pero a la larga las divisas se determinan libremente y creemos que ese sistema puede continuar y debe continuar operando tal y como está formulado a la fecha.
Obviamente, que nosotros no estábamos preparados el año pasado para un shock de esa naturaleza de la que tuvimos. En el escenario más negativo nosotros apenas llegábamos a una caída del 5 por ciento de los depósitos, nunca esperamos que íbamos a poder tener una caída de casi el 30 por ciento en los depósitos. Sin embargo, la fortaleza que tenía la economía al inicio de toda esta perturbación le permitió confrontar muy bien, incluso mejor que otros países que enfrentaron situaciones similares.
La parte positiva que creo que se rescata de este Informe, es que la economía después de junio se ha venido reactivando en el sector primario y el sector secundario. Creemos que eso es algo que se debe continuar promoviendo y respaldando, y esperaríamos nosotros que este nuevo ciclo productivo cuente con los fondos suficientes para que el país pueda tener la oportunidad que todos los nicaragüenses nos merecemos. Muchas Gracias
Presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras
Gracias, Doctor, Ovidio Reyes, Presidente del Banco Central. Le agradecemos a usted la presentación, igual a la Licenciada Sara Amelia Rosales, Gerente, General del Banco Central y al Señor Antonio Brenes, Gerente de Análisis Macroeconómico.